La búsqueda de un sujeto, que está sospechado de comercializar drogas, llevó ayer a la policía a un domicilio del barrio Colón, donde fue encontrada una significativa cantidad de porros y tres bagullos de picadura de marihuana, lugar en el que fue detenida la dueña de casa: una mujer de 54 años.
En ese momento, se encontraban con ella una nieta de 2 años y su hijo adolescente de 14, por lo que se dio intervención al Juzgado de Menores para que se definiera el lugar donde iban a ser alojados, debido a la reticencia de su madre-abuela de brindar datos sobre familiares que pudieran hacerse cargo de ambos (ver aparte).
Según revelaron fuentes de la Dirección de Drogas Peligrosas, hace algún tiempo habían recibido información de que un individuo se dedicaba a vender estupefacientes, y que “operaba” desde dos inmuebles del barrio Colón de esta ciudad.
Una vez que se hicieron los trabajos de inteligencia previa, el juez federal subrogante Guillermo Molinari autorizó que en la mañana de ayer se efectuaran los allanamientos.
Uno de ellos se hizo en una vivienda de Bolivia al 700, donde residía el supuesto distribuidor de las sustancias prohibidas. Pero allí no lo encontraron, y recibieron por respuesta de sus conocidos de que había viajado a La Plata.
Acto seguido, la comisión policial se dirigió a Bolivia y pasaje 21 del mismo complejo habitacional, porque allí vivía quien era buscado.
Tampoco fueron encontrados los jóvenes, aunque al hacer la requisa de rigor dieron con 303 cigarrillos de marihuana y tres envoltorios con la misma sustancia, dijeron los informantes.
Cuando se consultó con el magistrado federal sobre la situación, éste dispuso que la abuela fuera detenida e incomunicada, acusada de haber infringido la ley nacional Nº 23.737.
En otro orden, personal de Drogas Peligrosas aprehendió a siete personas de sexo masculino durante el pasado fin de semana, en tres procedimientos en los que el común denominador fue haber detectado la presencia de drogas.
El primero de ellos se realizó en la terminal de ómnibus el sábado, alrededor de las 13.30. Es que tres pasajeros –un mayor de edad y dos menores- promovían desórdenes en un colectivo de larga distancia de la cooperativa TAC. Cuando fueron requisados, se les secuestraron algunos porros, que pesaban poco más de cuatro gramos de marihuana.
Los tres residían en la localidad bonaerense de San Miguel y quedaron a disposición del Juzgado Federal de Santiago del Estero.
Algunas horas más tarde, más precisamente a las 20, los efectivos interceptaron en Suárez y Av. Belgrano a un motociclista al que se relacionaba con el tráfico de drogas.
Cuando revisaron las pertenencias del vecino del barrio El Vinalar (de 34 años), descubrieron dos tizas de clorhidrato de cocaína, cada una de las cuales pesaba 15 gramos, por lo que fue automáticamente privado de su libertad.
El tercer caso se produjo el domingo a las 10.30 en la playa de estacionamiento de una estación de servicios de Belgrano y Solís, donde un grupo compuesto por cuatro personas mayores de edad se habría encontrado en estado de ebriedad.
Cuando se los requisó, a uno de ellos se le incautaron media tiza de cocaína y una tableta de psicofármacos. De todas formas, por orden judicial fueron arrestados todos y puestos a disposición del juez Molinari.///(El Liberal)
abril 12, 2007
Crece la actividad de narcotraficantes
La policía logró secuestrar más de 300 porros de marihuana en el Bº Colón
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